MI VIAJE A UTOPIA

Cuando abordé aquella extraña nave teleguiada...se inició un viaje a los confines del universo en busca de respuestas existenciales, que muchas veces están más cerca de lo que pensamos...

 

Ríos de Sol, Ríos de Luna...

En ellos llegué para navegar

en un mar de estrellas

Montado en un barco de plata y oro

y viendo una estela brillante como ninguna

tomé su rumbo buscando un tesoro...

Pero no buscaba un cofre

lleno de alhajas, joyas y diamantes,

sino de nobleza, paz, respeto, comprensión, amor al prójimo

y ¡tántas cosas!

que están haciendo falta en nuestro planeta...

¿Buscaba descubrir otro mundo? Tal vez

Quizás sin saberlo esa era mi meta

y lo presentía...

Navegué mucho tiempo viendo cosas hermosas

porque en esa estela nuestras horas son años

sin antes ni después...

Es un viaje en el enigmático tiempo infinito,

Pero...¿Dónde estaba ese planeta?

Sin guerras, donde los seres no se exterminen entre ellos,

donde la verdadera paz no sea un mito

y los pueblos sean libres de decidir

su propio destino por pequeños que parezcan

y el más poderoso...¿No quiera torcer su libre albedrío?

Un planeta sin pobreza, sin hermanos con hambre,

sin niños desnutridos y ancianos abandonados,

sin falsos valores y egoismo exacerbado...

Los instrumentos de aquella curiosa nave

movían sus agujas en todas direcciones

sin rumbo fijo, más de pronto en el pánel

un anuncio como neón apareció...y decía...

"No vamos al Planeta Utopía"...

Y viendo que aquel control no tomaba nuevas acciones

Pensé...¿qué quizo decirme esta barca que vuela como un ave?

¿Es que acaso no existe ese planeta?

Y de pronto comenzó a marcar un nuevo rumbo...

Sorprendido observé que todos los instrumentos

señalaban lo mismo...Y titilaba la palabra..."Regreso"

Todo vibraba y entonces pregunté al cerebro central

¿Cómo, después de navegar tanto tiempo?

Y apareció una gran pantalla respondiendo mi incógnita...

y una voz que retumbaba desde los confines del universo dijo...

"Sí, porque ustedes mismos pueden hacer de su propio planeta

la meta que buscas...porque no hay en el universo un astro

que decida su propio destino...

sino seres que lo habitan y con la ayuda de Dios

Son quienes pueden construirlo..."

(EUR/Romántico/Derechos Reservados)

El Coloso de Rodas

Todavía en nuestros días, los arqueólogos, historiadores y demás investigadores serios siguen discutiendo sobre el fascinante tema de las Siete Maravillas de Mundo Antiguo, con el que abrimos nuestro blog el día de hoy con una de las maravillas, que hace volar nuestra imaginación...

                                        

                

Esta monumental obra comparable con la actual Estatua de la Libertad, se erigió como un monumento para recordar la victoria de los rodios sobre Demetrio Poliorcetes en el año 304 a.C. y  fue encargada a Cares de Lindos, oriundo de la isla de Rodas y quien había sido discípulo de Lisipo y era reconocido por haber esculpido en Tarento, una estatua del dios Zeus de 22 metros de altura. Así pues Cares de Lindos acepta aquel reto de construir la estatua más grande del mundo antiguo dedicada al dios Helios como protector de la ciudad y que debía tener un mínimo de 15 metros de altura. Cuando aceptó aquella obra los Rodios le preguntaron cuánto costaría construirla del doble de tamaño, a lo que Cares calculando precipitadamente, contestó que el doble de costo y los rodios aceptaron inmediatamente la propuesta, lo cual sería una decisión muy triste y hasta trágica para Cares de Lindos quien no había tomado en cuenta en su afán por obtener el contrato, que necesitaría para hacer aquella estatua el doble de tamaño, la cantidad de ocho veces más materiales del construcción, lo cual a la postre terminó llevándole a la quiebra y al suicidio, por lo cual realmente la obra tuvo que ser finalizada por Laques quien era también nacido en la aldea rodiana de Lindos en el año 292 a.C.

   

   Según el escritor antiguo Plinio el Viejo, llegó a medir 32 mts. de altura y otros cronistas de la época refieren que descansaba sobre una base de mármol blanco que pesaba unas      

70 toneladas.

                                                                                                                                                                                                      

En el año 226 a.C. es decir 66 años después de su construcción la colosal estatua fue destruída por un terremoto, sin embargo los habitantes de la isla decidieron dejarla acostada en el mismo sitio donde cayó para mantener contentos a los dioses según el oráculo y el año 654 d.C. los musulmanes se llevaron el bronce como botín de guerra y se dice que cuenta el mercader judío que transportó el material que necesitó 900 camellos para cargarlo. Y curiosamente, la misma cifra coincide con el tiempo que estuvieron los restos acostados allí en el mismo sitio, antes de que fueran tomados por los muslmanes...unos 900 años, ¿se dice rápido verdad?

¿Cómo acometieron los antiguos semejantes obras sin las maquinarias ni los avances con los que contamos hoy en día?

El Coloso de Rodas una de las más impresionantes maravillas del mundo antiguo

                                                                               

Y bien, queridos amigos, seguiremos desarrollando este interesantísimo tema,

Dios mediante en próximas entregas.